Los aparatos de desinfección por vapor desempeñan un papel decisivo en el tratamiento higiénico de materiales contaminados y contribuyen de manera importante a la prevención de infecciones en el ámbito médico.
¿Qué son los aparatos de desinfección por vapor?
Los aparatos de desinfección por vapor son instalaciones destinadas a eliminar los gérmenes patógenos de los aparatos médicos, los textiles y los residuos infecciosos mediante vapor de agua saturado. Son un componente fundamental de la prevención de infecciones en el sector sanitario.
Ámbito de aplicación:
La norma correspondiente se aplica a los aparatos de desinfección por vapor que se utilizan principalmente en medicina y para el tratamiento de residuos infecciosos del grupo C, por ejemplo, de conformidad con el artículo 10a de la Ley federal alemana sobre epidemias, código de residuos 18 01 03.
Objetivos de la desinfección por vapor:
• La interrupción de las cadenas de infección
• La eliminación de microorganismos patógenos
• La aplicación preferente del método, siempre que sea adecuado
Ámbitos de aplicación principales:
1. Ropa de cama como colchones y textiles:
La desinfección se realiza a temperaturas entre 75 y 105 °C. Es especialmente importante eliminar completamente el aire mediante vacío.
2. Residuos del grupo C:
Estos se tratan generalmente a temperaturas superiores a 105 °C. Dado que el material suele ser poroso, hueco o líquido, el embalaje y la separación influyen en la eficacia de la desinfección.
Términos importantes:
Desinfectar significa eliminar parcialmente los gérmenes mediante la destrucción o la inactivación irreversible de los agentes patógenos.
Esterilizar, por el contrario, significa destruir completamente todos los microorganismos, incluidas las esporas (véase EN 556-1).
Requisitos técnicos (según DIN 58949):
La norma exige medidas uniformes, denominaciones, materiales adecuados y una estructura segura de los aparatos. Igualmente importantes son la seguridad eléctrica, el etiquetado y la documentación adjunta.
Comprobación de la eficacia:
Para garantizar la eficacia, existen diferentes tipos de pruebas, entre ellas la prueba de tipo, la prueba tras la instalación y las pruebas de funcionamiento periódicas. La carga de prueba depende del material que se vaya a desinfectar (poroso, hueco o líquido). Para ello se utilizan aparatos de prueba estandarizados e indicadores biológicos. Estos últimos contienen microorganismos resistentes al calor y sirven para demostrar la eficacia de la desinfección.
Funcionamiento de los aparatos:
Existen normas claras para el funcionamiento, la puesta en marcha, el proceso de desinfección y la documentación. La documentación se lleva a cabo, por ejemplo, mediante un libro de aparatos y listas de control. Además, se prevén inspecciones periódicas, mantenimiento y mediciones comparativas. También se aplican determinadas normas en caso de parada o no utilización de los aparatos.
Requisitos de infraestructura:
Entre ellos se incluyen los requisitos relativos a las salas de instalación, las tuberías y las conexiones de suministro. Existen normas sobre el suministro de energía y medios, así como sobre la eliminación higiénica. Además, deben indicarse los valores de conexión y consumo.